Macrolepiota en maza de tambor/ Foto Cuchiflitos |
En esta temporada, no teníamos pensado dedicar ninguna entrada a la Lepiota Procera, entre otras razones, porque a estas alturas del calendario es bastante difícil encontrarla en el campo.
Sin embargo, la alarma producida en Cataluña por la intoxicación de varias personas, nos obliga a romper una lanza en favor de esta riquísima seta que nada ha tenido que ver con en el envenenamiento.Es cierto que los intoxicados comieron Lepiotas, pero no la Procera sino otra muy tóxica que se le parece -por algo es de la misma familia- llamada Lepiota Brunneoincarnata.
La característica principal de la Macrolepiota Procera conocida también como Parasol, Apagallums, Galamperna y Cachote,según se la nombre en castellano, catalán, euskera o gallego respectivamente, es su GRAN TAMAÑO, pudiendo alcanzar el sombrero de algunos ejemplares los cuarenta centímetros de diámetro. Cuando es joven, estos sombreros están cerrados alrededor del pie y se parecen a una maza de tambor. Una vez abiertos, tienen escamas y mamelón central y bajo él, en el himenio, láminas blancas. El pie es alto, hueco, fibroso y abultado en la base, tiene también un anillo doble y móvil que se desplaza verticalmente.
Estas son algunas de las características -no todas- que nos ayudarán a identificar una Lepiota. Pero si esto es dificil de recordar,lo que sí es fácil tener en cuenta es lo relativo a su gran tamaño; Basta saber que nadie debe recolectar una Lepiota cuyo sombrero sea MENOR DE 10 CENTIMETROS DE DIÁMETRO.
La característica principal de la Macrolepiota Procera conocida también como Parasol, Apagallums, Galamperna y Cachote,según se la nombre en castellano, catalán, euskera o gallego respectivamente, es su GRAN TAMAÑO, pudiendo alcanzar el sombrero de algunos ejemplares los cuarenta centímetros de diámetro. Cuando es joven, estos sombreros están cerrados alrededor del pie y se parecen a una maza de tambor. Una vez abiertos, tienen escamas y mamelón central y bajo él, en el himenio, láminas blancas. El pie es alto, hueco, fibroso y abultado en la base, tiene también un anillo doble y móvil que se desplaza verticalmente.
Estas son algunas de las características -no todas- que nos ayudarán a identificar una Lepiota. Pero si esto es dificil de recordar,lo que sí es fácil tener en cuenta es lo relativo a su gran tamaño; Basta saber que nadie debe recolectar una Lepiota cuyo sombrero sea MENOR DE 10 CENTIMETROS DE DIÁMETRO.
Por debajo de esta medida se encuentran no solo las nombradas Brunneoincarnata, también las peligrosísimas Lepiotas Helveolas.
MACROLEPIOTAS CON JAMON Y ALMENDRAS
Siguiendo una receta de Manuel Toharia en su “Libro de la setas”, vamos a preparar unas Macrolepiotas jóvenes, sanas y carnosas por estar cerradas aún en maza de tambor.
Por debajo de esta medida se encuentran no solo las nombradas Brunneoincarnata, también las peligrosísimas Lepiotas Helveolas.
MACROLEPIOTAS CON JAMON Y ALMENDRAS
Siguiendo una receta de Manuel Toharia en su “Libro de la setas”, vamos a preparar unas Macrolepiotas jóvenes, sanas y carnosas por estar cerradas aún en maza de tambor.
Ingredientes/ Foto Cuchiflitos |
Ingredientes:
- Lepiotas: Cantidad libre, aunque cuidado con abusar: a veces nos llevamos un susto innecesario, simplemente porque hemos comido demasiado. Para aquellos que con un “aperitivo” de setas no tienen suficiente, aconsejamos que las coman compañadas de una base de pasta o verdura.
- Aceite, máximo dos cucharadas por persona.
- Almendras picadas, una cucharadita para cada uno.
- Ajo, al gusto
- Jamón, al gusto
Forma de hacerlas:
1.- Se desecha el pie leñoso de las setas y se limpian retirando la cutícula del sombrero; esto último no es obligatorio pero las hará más digestivas y más suaves al paladar.
2.- En una sartén, echamos unas cucharadas de aceite y doramos ligeramente el ajo.
3.- Agregamos el jamón en tiras y las almendras picadas, rehogamos durante dos minutos y a continuación agregamos las setas troceadas.
Dejamos que sofrían a fuego lento durante diez minutos, o hasta que hayan consumido todo el agua, y servimos muy calientes; bien solas o como guarnición de un plato de pasta o verdura previamente cocida y rehogada.
Macrolepiotas troceadas sobre pasta/ Foto Cuchiflitos NOTA 1.-Como casi todas las setas, la Macrolepiota contiene un porcentaje muy alto de agua, que en este caso oscila entre 80/90%. También, y en cantidades muy pequeñas, contienen hidratos de carbono, proteínas, minerales , fibra y vitaminas B2 B3 y D2. Cada 2.- Los sombreros cerrados van muy bien para rellenar con carne; los abiertos pueden cocinarse como escalopes, como esos tan apetitosos que hace unos días publicó Petra en su blog mamaquehayparacenar.blogspot.com. 3.- Y como siempre, recordaros que antes de consumir una seta recolectada por manos no expertas, o en el caso de existir la más mínima duda, debéis dirigiros a cualquier Sociedad Micológica de vuestra ciudad donde estarán encantados de poder orientaros. Eso si, no las presentéis en bolsas de plástico ni destrozadas porque de esa forma, aunque los expertos quisieran ayudaros no podrían. |
Que receta más rica! la pena que ya no encuentro macrolepiotas donde las suelo coger habitualmente
ResponderEliminarMuchas gracias por la mención!
Buf! Que buena pinta! Supongo que sin no las conoces bien no debes comerlas!
ResponderEliminarHola Breakfast Lover, por supuesto que hay que conocerlas, pero si te fijas verás que no es dificil. Los envenenamientos son siempre causa de alguna imprudencia.
ResponderEliminarGracias por visitarnos
Hola Petra, echa un vistazo porque aunque no con la abundancia de principios de temporada, están volviendo a salir. Estas de la foto en el prao son de hoy mismo.
ResponderEliminarUn beso